13 Los discípulos entonces entendieron que les había hablado de Juan el Bautista.
14 Y cuando ellos llegaron al gentío, vino a él un hombre que se arrodilló delante de él, diciendo:
15 Señor, ten misericordia de mi hijo, que es lunático y padece terriblemente; porque muchas veces cae en el fuego, y muchas otras en el agua.
16 Y lo he traído a tus discípulos, pero no lo han podido sanar.
17 Y respondiendo Jesús, dijo: ¡Oh generación incrédula y perversa! ¿Hasta cuándo he de estar con vosotros? ¿Hasta cuándo os he de soportar? Traédmelo acá.
18 Y Jesús reprendió al demonio, y éste salió del muchacho, y quedó sano desde aquella hora.
19 Entonces, los discípulos se acercaron a Jesús aparte y dijeron: ¿Por qué nosotros no pudimos echarlo fuera?