32 Junto a las aguas de Meribálos israelitas hicieron enojar a Dios,y por culpa de ellosle fue muy mal a Moisés;
33 tanto le amargaron el ánimoque Moisés no midió sus palabras.
34-35 Dios les había ordenadodestruir a los otros pueblos,pero ellos no lo obedecieron.¡Todo lo contrario!Se mezclaron con ellosy siguieron sus costumbres;
36 adoraron a sus ídolosy se volvieron sus seguidores.
37-38 ¡Mancharon la tierraal derramar sangre inocente!¡Entregaron a sus hijos y a sus hijascomo ofrenda a esos demonios!
39 Al cometer tales acciones,se corrompieron a sí mismosy resultaron culpables.
40 Dios se enojó mucho con ellosy acabó por aborrecerlos.