107-110 Dios mío,¡ya es mucho lo que he sufrido!Mi vida está siempre en peligro,pero nunca olvido tus enseñanzas.Los malvados me ponen trampas,pero yo obedezco tus mandamientos.Recibe con agradoesta alabanza que te ofrezco,y enséñame tu palabra.Cumple tu promesa y dame ánimo.