22 Porque éstos son días de venganza, para que se cumplan todas las cosas que están escritas.
23 Pero, ¡ay de las que estén encintas y de las que críen en aquellos días!, porque habrá gran calamidad en la tierra e ira sobre este pueblo.
24 Y caerán a filo de espada y serán llevados cautivos a todas las naciones; y Jerusalén será hollada por los gentiles hasta que se cumplan los tiempos de los gentiles.
25 Entonces habrá señales en el sol, y en la luna y en las estrellas; y en la tierra habrá angustia de las naciones y confusión ante el bramido del mar y de las olas;
26 desfalleciendo los hombres a causa del temor y de la expectación de las cosas que sobrevendrán en la tierra, porque los poderes de los cielos serán sacudidos.
27 Y entonces verán al Hijo del Hombre que vendrá en una nube con poder y gran gloria.
28 Y cuando estas cosas comiencen a suceder, mirad y levantad vuestras cabezas, porque vuestra redención está cerca.