19 (Éste había sido echado en la cárcel por sedición en la ciudad y por un homicidio.)
20 Y les habló otra vez Pilato, queriendo soltar a Jesús.
21 Pero ellos volvieron a dar voces, diciendo: ¡Crucifícale, crucifícale!
22 Y él les dijo por tercera vez: ¿Pues qué mal ha hecho éste? Ninguna culpa de muerte he hallado en él; le castigaré, pues, y le soltaré.
23 Mas ellos insistían a grandes voces, pidiendo que fuese crucificado. Y las voces de ellos y de los principales sacerdotes prevalecieron.
24 Entonces Pilato determinó que se hiciese lo que ellos pedían.
25 Y les soltó a aquel que había sido echado en la cárcel por sedición y homicidio, a quien habían pedido; y entregó a Jesús a la voluntad de ellos.