5 Considero una muestra de amorque una persona honradame regañe o me golpee;para mí, sus reprensionesson como fino perfume.Dios mío, yo siempre te pidoque castigues a los malvados.
6 Cuando los gobernantes malvadosacaben en la ruina,se acordarán de mis palabrasy sabrán que les hablé con dulzura.
7 Entonces la gente dirá:«Sus huesos han quedadoesparcidos por el suelo».
8 Por mi parte, Dios mío,de ti dependo,y en ti busco refugio.¡No dejes que me maten!
9 ¡Líbrame de las trampasque esos malvados me tienden!
10 ¡Haz que sean ellos mismoslos que caigan en sus redes!Pero a mí, ¡ponme a salvo!