1 El SEÑOR es mi pastor, nada me falta.
2 Me lleva a descansar a prados verdes, y me conduce a manantiales de agua fresca.
3 Él renueva mi alma. Me lleva por buenos caminos para mostrarme lo bondadoso que es.
4 Aunque pase por caminos oscuros y tenebrosos, no tendré miedo, porque tú estás a mi lado; tu vara y tu bastón me reconfortan.