22 El SEÑOR herirá a Egipto y luego lo restaurará, porque los egipcios se volverán al SEÑOR y él escuchará la súplica de ellos y los sanará.
23 En aquel día Egipto e Irak estarán unidos por una carretera y egipcios e iraquíes viajarán libremente entre uno y otro país, y adorarán al mismo Dios,
24 e Israel será su aliado. Los tres estarán juntos e Israel será para ellos bendición.
25 Porque el SEÑOR bendecirá a Egipto y a Irak por causa de su amistad con Israel. Él dirá:«Bendito sea Egipto, pueblo mío; bendito sea Irak, nación que yo hice; bendito sea Israel, heredad mía».