3 ¿Y qué haréis en el día de la visitación y en el asolamiento que vendrá de lejos? ¿A quién os acogeréis para que os ayude? ¿Y en dónde dejaréis vuestra gloria?
4 Sin mí se doblegarán ante los presos y entre los muertos caerán. Ni con todo esto ha cesado su furor, sino que su mano aún está extendida.
5 ¡Oh Asiria, vara de mi furor! El bastón en su mano es mi indignación.
6 La mandaré contra una nación impía, y contra el pueblo de mi ira la enviaré, para que quite los despojos y arrebate la presa, y lo ponga para ser hollado como lodo de las calles.
7 Aunque él no lo pensará así, ni su corazón lo imaginará de esta manera, sino que en su corazón estará el destruir y talar naciones no pocas.
8 Porque él dice: Mis príncipes, ¿no son todos reyes?
9 ¿No es Calno como Carquemis, Hamat como Arfad, y Samaria como Damasco?