10 Todos ellos darán voces y te dirán: ¿También tú te debilitaste como nosotros y llegaste a ser como nosotros?
11 Descendió al Seol tu soberbia y el sonido de tus arpas; gusanos son tu lecho, y gusanos te cubren.
12 ¡Cómo caíste del cielo, oh Lucifer, hijo de la mañana! Derribado fuiste a tierra, tú que debilitabas a las naciones.
13 Tú que decías en tu corazón: Subiré al cielo. Levantaré mi trono por encima de las estrellas de Dios y me sentaré sobre el monte de la congregación, hacia los lados del norte;
14 sobre las alturas de las nubes subiré; seré semejante al Altísimo.
15 Pero tú has sido derribado hasta el Seol, a los lados del abismo.
16 Los que te vean te mirarán fijamente y te considerarán, diciendo: ¿Es éste el hombre que hacía temblar la tierra, que trastornaba los reinos,