9 Porque ha dicho: De nada le servirá al hombre el deleitarse en Dios.
10 Por tanto, hombres de entendimiento, oídme: Lejos esté de Dios la maldad, y del Omnipotente la iniquidad.
11 Porque él pagará al hombre según su obra, y le retribuirá conforme a su camino.
12 Sí, ciertamente, Dios no hará maldad, y el Omnipotente no pervertirá el juicio.
13 ¿Quién le encomendó el cuidado de la tierra? ¿Y quién puso en orden todo el mundo?
14 Si él pusiese sobre el hombre su corazón, y recogiese así su espíritu y su aliento,
15 toda carne perecería juntamente, y el hombre volvería al polvo.