40 Pidieron, e hizo venir codornices; y los sació con pan del cielo.
41 Abrió la peña, y fluyeron aguas; corrieron por los sequedales como un río.
42 Porque se acordó de su santa palabra dada a Abraham, su siervo.
43 Y sacó a su pueblo con gozo, con júbilo, a sus escogidos.
44 Y les dio las tierras de las naciones; y los frutos de las labores de las naciones heredaron,
45 para que guardasen sus estatutos y observasen sus leyes. ¡Aleluya!