Salmos 45 RVR1909

1 Rebosa mi corazón de palabra buena; dirijo al Rey mi cántico; mi lengua es pluma de escribiente muy ligero.

2 Eres el más hermoso de los hijos de los hombres; la gracia se ha derramado en tus labios; por tanto, Dios te ha bendecido para siempre.

3 Ciñe tu espada sobre el muslo, oh valiente, con tu gloria y con tu majestad.

4 Y en tu majestad sé prosperado; cabalga sobre palabra de verdad, y de humildad y de justicia; y tu diestra te enseñará cosas temibles.

5 Tus saetas agudas, con que caerán pueblos debajo de ti, penetrarán en el corazón de los enemigos del rey.

6 Tu trono, oh Dios, es eterno y para siempre; cetro de justicia es el cetro de tu reino.

7 Has amado la justicia y aborrecido la maldad; por tanto, te ha ungido Dios, el Dios tuyo, con óleo de alegría más que a tus compañeros.

8 Mirra, áloe y casia exhalan todos tus vestidos; desde palacios de marfil te han alegrado.

9 Hijas de reyes hay entre tus damas de honor; está la reina a tu diestra con oro de Ofir.

10 Escucha, hija, y mira e inclina tu oído; y olvida tu pueblo y la casa de tu padre,

11 y deseará el rey tu hermosura. E inclínate a él, porque él es tu Señor.

12 Y la hija de Tiro vendrá con presentes; implorarán tu favor los ricos del pueblo.

13 Toda gloriosa es la hija del rey en su habitación; de brocado de oro es su vestido.

14 Con vestidos bordados será llevada al rey; las vírgenes, sus compañeras que la siguen, serán llevadas a ti.

15 Serán llevadas con alegría y regocijo; entrarán en el palacio del rey.

16 En lugar de tus padres serán tus hijos, a quienes harás príncipes en toda la tierra.

17 Haré que tu nombre sea recordado por todas las generaciones, por lo cual te alabarán los pueblos eternamente y para siempre.