Salmos 86 RVR1909

1 Inclina, oh Jehová, tu oído, respóndeme, porque estoy afligido y necesitado.

2 Guarda mi alma, porque soy piadoso; salva tú, oh Dios mío, a tu siervo que en ti confía.

3 Ten misericordia de mí, oh Señor, porque a ti clamo todo el día.

4 Alegra el alma de tu siervo, porque a ti, oh Señor, elevo mi alma.

5 Porque tú, Señor, eres bueno y perdonador, y abundas en misericordia para con todos los que te invocan.

6 Da oídos, oh Jehová, a mi oración y atiende a la voz de mis ruegos.

7 En el día de mi angustia te invocaré, porque tú me responderás.

8 Ninguno hay como tú entre los dioses, oh Señor, ni obras que igualen tus obras.

9 Todas las naciones que hiciste vendrán y adorarán delante de ti, oh Señor, y glorificarán tu nombre,

10 porque tú eres grande y hacedor de maravillas; sólo tú eres Dios.

11 Enséñame, oh Jehová, tu camino; caminaré yo en tu verdad; consolida mi corazón para que tema tu nombre.

12 Te alabaré, oh Jehová, Dios mío, con todo mi corazón, y glorificaré tu nombre para siempre.

13 Porque tu misericordia es grande para conmigo, y has librado mi alma de lo más profundo del Seol.

14 Oh Dios, los soberbios se han levantado contra mí, y una congregación de violentos ha buscado mi vida, y no te han puesto delante de sí.

15 Mas tú, oh Señor, Dios misericordioso y clemente, lento para la ira y que abundas en misericordia y verdad,

16 vuélvete hacia mí y ten misericordia de mí; da tu fortaleza a tu siervo, y salva al hijo de tu sierva.

17 Haz conmigo una señal para bien, y véanla los que me aborrecen y sean avergonzados, porque tú, oh Jehová, me ayudaste, y me consolaste.